15 marzo 2009

La cuenta atrás prosigue: faltan doce meses

Queridos Hermanos todos:

La pasada Gran Asamblea de la GLE, del 14 de Marzo, transcurrió según el guión previsto. Una ceremonia nada masónica, en donde la Luz brillaba por su ausencia. Los puntos del Orden del Día transcurrían sin la menor transmisión de conocimiento iniciático. Todo son trámites y pura burocracia. Todo son papeles. Y cuando no hay papeles físicos, derivación a estos en la web de la Institución. La palabra como transmisión de conocimiento y verdad hace tiempo que está muerta en nuestra Orden.

El objetivo de estas reuniones está claro: cumplir por obligación con aquello administrativo mínimo que manda la Constitución y los Reglamentos actuales (naturalmente, ajustado a las voluntades e intereses de quien ostenta el mando, claro). Presentar y votar. No hay tiempo, ni espacio, para nada más y menos aún si éste se sale del guión.

Sin embargo, hay motivos para la esperanza. Varios Hermanos aprovecharon la interrupción de los trabajos previos a las votaciones, para comprobar algo muy importante: NO estamos solos. Quizás no muchos de los asistentes, cierto. Pero ya se empiezan a formar grupos de opinión que libremente piensan que otra masonería no sólo es posible: es inevitable. Sólo es cuestión de tiempo y trabajo. Justo dos de los valores que nuestros antepasados operativos nos han legado (¿Cómo sino se construían las Catedrales?)

Pasear grandes mandiles, condecoraciones, medallas y estandartes, por un Templo masónico, sólo es muestra de la inevitable vanidad profana que a diario nos rodea y que nada tiene que ver con nuestra Orden Iniciática (¿recordamos que es esto?). Sólo nuestros valores nos pueden hacer crecer y estos son incompatibles con los vicios profanos.

No estamos solos. Otra Francmasonería Regular Española es posible. Hermanos, tomad todos vuestras herramientas de trabajo. Quedan doce meses para empezar a cambiar las cosas. ¿O quizás algo ya ha empezado a cambiar?

Recibid todos un T.·.A.·.F.·.

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